Nº 5, la mismísima esencia de la feminidad. Un ramillete floral empolvado sublimado por un frasco icónico de líneas minimalistas. Un perfume mítico y atemporal. En 1921, Gabrielle Chanel encarga a Ernest Beaux la creación de un perfume de mujer con olor de mujer, extraordinario y poderoso. La nariz le propone una composición visionaria que apela a una utilización inédita de los aldehídos. Mademoiselle selecciona la versión número 5 de la fragancia, y decide conservar este sencillo número como nombre. Para este nuevo jugo, elige un frasco radical, adornado con una etiqueta blanca y cubierto con un capuchón poliédrico. En 1986, Jacques Polge, nariz de CHANEL desde 1978, reinterpreta la partitura olfativa de su predecesor para dar origen a una versión más amplia del N 5: el Eau de Parfum. El Eau de Parfum se inspira en el perfume con el que comparte su firma floral aldehído. Este ramillete floral se compone en torno a la Rosa de Mayo y el Jazmín y las notas de cabeza quedan animadas por los Hespéridos. Los Aldehídos le otorgan una presencia única, y el suave toque de Vainilla ofrece una estela infinitamente sensual.